Los usos de Oculus Rift han pegado el salto de los video juegos hasta otras aplicaciones tales como las que vamos a ver en esta entrada que es la de ver con nuestros propios ojos y sin operaciones de por medio, como sería un cambio de sexo, es decir “vemos” con nuestros ojos como si estuviéramos viendo nuestro cuerpo pero con el sexo contrario y viceversa la otra persona que participa del experimento.
El proyecto liderado por BeAnotherLabs llama a este “La máquina de ser otro” y consta de poner a dos personas del sexo opuesto espalda con espalda, sincronizar sus movimientos y ver lo que el otro ve en 3D como nos permite Oculus Rift.
Veamos (Algo de desnudes en el video, así que ojo donde lo ven)