Elon Musk, dueño de la compañía aeroespacial privada SpaceX anunció que durante la segunda parte del 2018 enviará a dos turistas en su cápsula Dragón a orbitar la luna. Estos turistas cuyas identidades no se han dado a conocer pero si informaron que ya han pagado un “gran” deposito para realizar esta misión a la luna y pronto empezarán el entrenamiento pertinente para tal viaje.
Esta misión es posible con el apoyo del programa comercial de tripulaciones de la NASA que aportó fondos para el desarrollo de la cápsula Dragon 2 que será llevada al espacio por el cohete “Falcon Heavy” desarrollado con fondos privados de SpaceX, este es un cohete que tendrá su primer vuelo de prueba durante el 2017 y se trata de uno de los más poderosos después del Saturn V quien impulsara las anteriores misiones a la luna.
Durante algún momento del 2017 la NASA enviará la cápsula Dragon 2 a la estación espacial internacional para una demostración automática y sin humanos a bordo con una subsecuente misión durante el 2018. Actualmente SpaceX tiene un contrato para enviar alrededor de cuatro misiones a la ISS con la cápsula Dragon 2, tres con carga y dos con tripulación. Al volar misiones con tripulación del tipo privada, la NASA y SpaceX se ven beneficiados en un momento donde los presupuestos se achican cada vez más.
Una vez que la tripulación privada de la misión Dragon se encuentre operacional, las dos agencias lanzarán la misión privada que de una vuelta a la luna y vuelva a la tierra, esta misión despegará desde el centro espacial Kennedy desde el histórico sitio de lanzamiento 39A cerca de Cabo Cañaveral, lugar que fuera utilizado por el programa Apollo en sus misiones a la luna.
Estos viajes marcan el regreso de los humanos al espacio profundo y la puesta a prueba de los vehículos que los llevarán de vuelta a la exploración espacial en pos de llegar a la meta más importante que es la de enviar humanos a Marte.