El café y la cerveza, dos bebidas diferentes que estimulan a nuestro cerebro de formas diferentes, por un lado la cerveza realmente nos inspira y la creatividad comienza a aflorar con algunas jarras de esta bebida de por medio, lo único malo es que no nos podemos enfocar mucho que digamos, estamos algo así como dispersos. Por otro lado, tenemos a nuestro viejo y querido café, este nos ayuda a enfocarnos en lo que estamos haciendo y nos brinda mucha más energía para hacerlo, lo único malo es que si bebemos café periódicamente, aunque sea en pequeñas cantidades, empezamos a construir tolerancia a la cafeína requiriendo así, tomas cantidades más altas de esta bebida para lograr los mismos resultados.
En la siguiente infografía podemos ver algunos detalles más:
Más que interesante pero ya saben, todo en su justa medida, mucho alcohol no ayuda en nada directamente y mucho café, menos que menos y no me vengan a tomar las dos juntas como para equilibrar, que no funciona así 😛