Los gobiernos de los EE. UU., El Reino Unido y otros tres han pedido a compañías tecnológicas que construyan puertas traseras en sus productos encriptados, para que las autoridades puedan obtener acceso siempre que lo deseen/necesiten. Si las empresas no lo hacen, los gobiernos dicen que “pueden utilizar medidas tecnológicas, de cumplimiento, legislativas o de otro tipo” para acceder a dispositivos y servicios encriptados/bloqueados.
Esta declaración surgió de una reunión hace unas semanas entre naciones que se encuentran en el pacto ¨Cinco Ojos¨, un acuerdo de intercambio de inteligencia entre los EE. UU., El Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Estas emitieron una declaración que cubre una variedad de cuestiones que enfrentan y que están relacionadas con la tecnología, pero fueron sus comentarios sobre el cifrado los que destacaron más.
En su comunicado, los gobiernos subrayan que estas puertas traseras solo serían para el acceso “legal” a un dispositivo, como en una investigación criminal y planean comenzar por animar a las compañías tecnológicas a que los agreguen voluntariamente, pero las puertas traseras solo serían voluntarias hasta cierto punto porque los gobiernos dicen que podrían obligar a estas empresas a hacerlo si “siguen encontrando impedimentos” para acceder a los datos encriptados.
Por ahora, este pedido de una puerta trasera es más un deseo que una orden o una amenaza, pero la declaración habla del creciente movimiento contra el cifrado por parte de los gobiernos y los legisladores que lo ven como un impedimento para la aplicación de la ley a medida que el cifrado sea cada vez más accesible en los próximos años. Es probable que estas solicitudes crezcan y que, finalmente, puedan dar lugar a acciones.
Las tecnológicas también han sido cautelosas en cumplir. Agregar una puerta trasera a sus productos significaría inherentemente que su promesa de privacidad de datos no se estaría cumpliendo y además los abriría a solicitudes similares de otros países que podrían usar el acceso de puerta trasera para espiar en circunstancias inapropiadas.
Además de tocar el tema del cifrado, estas naciones también emitieron un comunicado sobre cómo mantener los espacios en línea libres de predadores de menores, terroristas y otros malos personajes. Pidieron a las compañías que desarrollaran herramientas que evitaran que el contenido ilegal se “cargue” si quiera en sus plataformas y reiteraron solicitudes comunes actualmente tales como como usar humanos y herramientas automatizadas para eliminar contenido existente y colaborar con toda la industria para identificar este tipo de contenido para que no se propague más allá.